"Lo importante no son los años de vida sino la vida de los años".

"Que no os confundan políticos, banqueros, terroristas y homicidas; el bien es mayoría pero no se nota porque es silencioso.
Una bomba hace más ruido que una caricia, pero por cada bomba que destruye hay millones de caricias que alimentan la vida".

Al mejor padre del Mundo

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miércoles, 28 de octubre de 2020

QUÉDATE EN CASA


QUÉDATE EN CASA...

Quédate en casa –que nosotros te dejamos sin trabajo y llevamos tu empresa, esa que te costó tantos años crear, a la quiebra-.
Quédate en casa –que nosotros decidimos por ti; a qué hora puedes salir y en qué condiciones-.
Quédate en casa mientras implantamos el comunismo en España.
Quédate en casa mientras nosotros dejaremos a las mafias disfrazadas do ONG's traernos miles de inmigrantes sin
oficio ni beneficio.
Quédate en casa –aunque no tengas dinero para comprar comida-.
Quédate en casa –aunque a tus padres les queden pocos años de vida y te necesiten-.
Quédate en casa –y no veas a tus nietos por las dudas que te contagien o tu les puedas avisar de los peligros-.
Quédate en casa –y aunque no generes ingresos, sigue pagando impuestos-.
Quédate en casa –mientras nosotros ponemos a los presos en libertad-.
Quédate en casa –mientras reventamos la economía quitándote del medio-.
Quédate en casa –porque si sales corres el riesgo de morirte de una gripe que tiene un dos por ciento de mortalidad-.
Quédate en casa –así podemos ejecutar nuestro plan sin escuchar protestas-.
Quédate en casa –así te podemos controlar mejor con nuestros dispositivos aéreos aunque tu pienses que son naves espaciales de otro planeta-.
Quédate en casa –así podremos continuar con nuestra agenda mundial sin interferencias-.
Quédate en casa –que nosotros te dejamos una lista de entretenimientos virtuales para que no te hagas preguntas sobre la “nueva normalidad”-.
Quédate en casa –que nosotros estamos trabajando duro para asegurarnos de que cada día estés más alejado de tus vínculos-.
Quédate en casa –y ojo con lo que dices o haces porque tus vecinos también actúan como policías-.
Quédate en casa –no te expongas a la luz solar, ni a los gérmenes así terminaremos de destruir tu sistema inmunitario-.
Quédate en casa –habla por teléfono mientras nosotros escuchamos tus llamadas y nos acercamos un poquito más al plan perfecto-.
Quédate en casa –no utilices el poco efectivo que te queda así lo iremos sacando de circulación para crear una sola moneda-.
Quédate en casa –así podremos subir torres radiactivas sin que tu te enteres-.
Quédate en casa –y sí sales, por necesidad, lleva una máscara puesta, para generar separación, no inmunidad-.
Quédate en casa –aléjate de todo lo que te hace humano, así nuestra interferencia es más sutil y no encontrarás culpables-.
Quédate en casa –así iremos estudiando tu comportamiento para cuando esto sea la norma-.
Quédate en casa –como cuando el modelo estalinista daba órdenes y la gente cumplía. Solo que él lo hacía con muerte y represión y nosotros con tu miedo a la muerte-.
Quédate en casa –no pelees por tus derechos como ciudadano ni por tu familia, te queremos dócil, no rebelde-.
Quédate en casa –sin sueldo, sin vacaciones, sin viajes, sin futuro, sin cultura, pero con Netflix y Mediaset-.
Quédate en casa –mientras seguimos gestionando una dictadura con tu ignorancia--.
Quédate en casa –y repite nuestros mensajes mil veces y diles a los otros que también lo repitan. Porque de tanto decirlo, te lo vas a terminar creyendo. No por dos meses o seis, o un año, sino por el resto de tu vida.
NOS QUIEREN ESCLAVOS.
¡A LA LUCHA, POR LA LIBERTAD!

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